lunes, 2 de febrero de 2015

La noche de los asesinos (análisis)

Palabra y tono
      Para esta obra se aplican especialmente dos elementos. El primero es el concepto de la metateatralidad. Es decir, los personajes representan una obra dentro de la obra que el espectador está observando. En "La noche de los asesinos" los tres hermanos siempre hacen una personificación dentro de la obra. Esta característica la tiene también Luigi Pirandello en "Seis personajes en busca de un autor". Una obra de teatro que trata de otra pieza teatral. Además, "La noche de los asesinos" pertenece al teatro del absurdo, pues carece de algún inicio o final. Entre los personajes existen diálogos y situaciones incongruentes. Alfred Jarry fue uno de los precursores de esta tendencia (Ubu Rey).

Gesto, mímica y proxemia 
            El personaje de Lalo acosa constantemente a Cuca. Este tira sus cosas y por lo general siempre la persigue. Cuca trata de apartarse, pero el se le acerca. Beba por su parte tiene miedo de Lalo y le sigue el juego sin refutarlo. Ella es la más distante de los tres.
              En sus gesto Cuca puede parecer nerviosa o cansada durante la obra, pues el juego de sus hermanos la fastidia. Lalo es muy cambiante, puede notarse reflexivo. Pero en muchos casos es serio. El personaje es muy violento y tiene altos y bajos durante toda la obra. Beba, en cambio, pareciera estar en otro mundo y muchas veces es indiferente.
                 Los personajes imaginarios tienen sus propios gestos y espacios. Pantaleon es un viejo que se queja de su achaques y Margarita es una señora insoportable que constantemente acosa a Cuca y puede ser un poco intrusa. Sus movimientos se asemejan a la bruja de "Blancanieves".

Vestuario y maquillaje
          La representación se desarrolla en un sótano. En este sentido, el vestuario es ropa de casa. Pantalones y franelas sueltas. Predominan los colores grises y en general el aspecto sucio o desaliñado de los personajes. Por otro lado, los actores juegan con la definición de metateatro y esto permite que el vestuario cambie. Por ejemplo: cuando llegan los invitados utilizan sombreros y bufandas. 
         El maquillaje será: caras muy pálidas con ojeras para resaltar la locura y lo absurdo de esta obra.

Escenografía y utilería
En "La noche de los asesinos" hay dos decoraciones: uno que se presenta perceptiblemente y otro sugerido. En nuestra obra el escenario permanece igual hasta el final. Sin embargo, existen otros sugeridos por los personajes y de los cuales los espectadores tienen que crearse una imagen visual.
Los signos escénicos con que comienza la obra muestran un lugar empolvado y descuidado de la casa: en un sótano con una mesa, dos sillas, un florero, un cenicero, un mueble y un plumero. En el piso: una muñeca de trapo, bufandas y un par de zapatos. La obra se desenvuelve en un sótano porque es un lugar apartado, empolvado, poco visitado por la familia y significa la marginalidad existencial de los tres jóvenes. Además, como lugar usualmente frecuentado por los niños para sus juegos, connota que estos jóvenes siguen siendo tratados como niños y no han podido madurar psicológicamente. Además de la decoración que aparece de manera perceptible, hay espacios y objetos del teatro que no se muestran de un modo visible y que el espectador tiene que suplir con su imaginación.

Iluminación y musicalización
         En nuestra obra se utiliza luz tenue de color amarillo para que simule a un sótano, y crear la impresión de ambiente tenso, viejo y no tan alumbrado. En escenas de la pieza, también se incluye un seguidor para hacer énfasis en los personajes y luces led de color rojo para indicar un momento de agresividad y desenlace.
          A lo largo de la obra no hay música. El único sonido que destaca es una puerta que se cierra.

Bibliografía
http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/el-asedio-a-la-casa-un-estudio-del-decorado-en-la-noche-de-los-asesinos/html/9874ed36-a0fa-11e1-b1fb-00163ebf5e63_2.html